jueves, 1 de mayo de 2008

Cambios (II)

En el anterior post (que bien podría ser ya casi de la edad media) os contaba un poquito de mis andanzas durante estos últimos años, para no volver a repetirme solo decir que han sido una experiencia maravilla; pero vamos a dejar ya esa parte pasada para irnos a la parte novedosa de toda mi vida.

Todo comenzó el 23 de Septiembre, un lunes, hacía una semana que una compañera de trabajo me había reenviado un correo de invitación a una fiesta de cumpleaños, de quien quizá en un tiempo sea mi concuñada. Era un lunes, pero bueno el plan de pasar la noche en el Azúcar parecía algo interesante, total que después de cenar un poco me fui para allá.

Allí estaban ya otros compañeros y la cumpleañera y su "noivo" (después os comento esto de las palabrejas raras); pedí mi havana 7 con coca cola de rigor y comenzamos todos la charla y las risas típicas de una celebración de cumpleaños.

Al cabo de un tiempo, no sé bien deciros de cuanto, llegó la compañera de piso de la homenajeada, una tal Regina, y no sé por qué solo había un sitio libre en la mesa, y este era justo al lado mío; entablamos conversación y bueno parece que nos dábamos bien.

Bailoteo bailoteo... total que nos dieron las 3 de la mañana, típicos intercambios de teléfonos y esas cosas.... No que servidor no sabía es que acababa de conocer a la que será mi futura mujer.

Fuimos quedando más días, pasamos juntos aquel fin de semana en el spa (hay una entrada dedicada en el blog para aquel fin de semana), y como quien no quiere la cosa, sin pensar en ello la relación se iba haciendo más seria, y nunca me he sentido tan bien con alguien como me siento con ella.

Así son las cosas, después de esta introducción comentarios, por si alguno no lo sabía ya, que me caso, y me mudo a vivir a São Paulo.

Voy a repetirlo por si alguien se ha atragantado, me caso y me mudo a vivir a São Paulo, así que ya sabéis, si a alguien le apetece conocer Brasil, tiene casa, guía e indicaciones.

Lo que más voy a sentir es que va a ser complicado que muchos aquellos que me encataría compartir con ellos el día de mi boda no van a poder estar presentes, distancias, costes etc etc hacen muy complicado que estemos juntos, pero no os desaniméis porque algo estamos preparando cerca de casa, aunque sea una mínima fiesta, algo tenemos que celebrar.

Por otro lado, sí me quiero casar, y como diría alguien que me conoce mucho "es maravilloso estar enamorado".

Espero poder repetir mas posts, prometo no tardar demasiado, tengo mil historias a raíz de la preparación de la boda, os iré informando del funcionamiento ceremonial brasileño, y de la infinita cantidad de tareas que tengo en el cronograma, así como los pasos legales, que parece que hay que invocar hasta los espíritus para conseguir todos los papeles para casarse.

En fin señores, la vida cambia, y todos cambiamos con ella, en este caso el cambio es a mejor, espero que a partir del día 11 que estaré en España consiga veros a todos, porque esta vez no os escapáis.

Saludos y un abrazo muy fuerte

2 comentarios:

PusSiN dijo...

Emocionante post una vez más querido Julín.

El título totalmente acertado, cambios, muchísimos cambios.

Lo de Brasil, sabes tu que harto complicado, pero bueno...si vas a hacer algo por aquí, cuenta con mi indigna presencia.

Agur!

Anónimo dijo...

Querido Julín:
Llevo mese sin verte y no se ni como me atrevo a escribirte. Por algo soy el indigno protozoo q soy, pero bueno.
Sólo quería felicitarte por tu boda y por tu estado de felicidad absoluta en lo profesional y sobre todo en lo snetimental.
Me alegro mucho por ti y espero verte muy muy pronto.
Un abrazo, Miguel